Si hay algo que, creo, a estas alturas todos tenemos claro es que o hacemos algo colectivamente para frenar el cambio climático o nos vamos al carajo. No será mañana, pero sí pasado. Y esto de pasado, es literal, vistas la últimas noticias sobre las temperaturas en Siberia y lo que está pasando con el permafrost; las inundaciones salvajes de Alemania, Bélgica y Holanda donde han registrado las lluvias más intensas desde que hay registros (y llevan no sé cuántos muertos, en pleno julio)… Por no hablar de mosquitos tropicales expandiéndose por Europa (España, Francia, Italia… de momento), que podrían empezar a contagiarnos enfermedades que hasta ahora eran de otras latitudes como la malaria o el dengue…
Si tienes hijos, supongo que eres consciente de que tus hijos vivirán de forma muchísimo más grave las consecuencias de nuestras inacciones de hoy. Vamos, que Greta tiene toda la razón al enfadarse. Pero si te pasa como a mí, seguramente tampoco sabes por dónde empezar.
Así que, no sabiendo por dónde empezar, en abril hice el training de Climate Reality Leadership Corps, la organización de Al Gore. Siempre que hablamos de cambio climático, de emergencia climática, mi pensamiento es que sin políticas públicas que acompañen, yo poco puedo hacer…
Pero lo cierto es que con muchos pocos, se han logrado cambios revolucionarios. Aquello de grano no hace granero, pero ayuda al compañero.
Así que hoy, imbuida de este espíritu de cambio y después de haber hecho un poco de autoanálisis, vamos con algunas herramientas y webs y recursos varios para ayudarnos a cambiar, a hacer pequeños gestos, a que nuestros granitos aporten…
Por ejemplo: ¿Quieres saber cuál es tu huella de carbono cuando coges un avión? En esta web lo puedes ver. Es dramático ver el impacto que un vuelo transoceánico tiene en términos de kg. de CO2 enviados a la atmósfera. Digamos que en unas horas te pules el doble de lo que debería ser tu huella anual. Igual hay que replantearse algunos viajes y tratar de minimizar nuestra huella…
Hay iniciativas de origen público como Zerodespilfarro, que es de la Fundación Elika, la fundación vasca para la seguridad agroalimentaria, que contienen infinidad de consejos para tratar de minimizar residuos y ahorrar alimentos (y no tirar tanta comida). Si tiramos menos comida, habrá que producir menos comida. También Ihobe tiene un artículo con consejos prácticos para conseguir una alimentación circular.
¿Quieres tener un huerto en tu balcón, alfeizar o jardín? Pues puedes realizar tu propio compost.
Súmate a las iniciativas locales, sigue tu instinto, camina más y usa el transporte público más también. Evita el coche siempre que puedas. Ojo con lo eléctrico, que lo eléctrico usa baterías que hay que cargar… y todo aparato eléctrico utiliza componentes que son de difícil extracción y más difícil reciclaje. Apaga del todo ordenador, televisor. No dejes los electrodomésticos en stand-by. No se trata de ahorrar en la factura de la luz, que también, se trata de gastar menos luz.
Algunas apps interesantes:
Ecosia (para iOS y Android). Es un buscador alternativo a Google que destina el 80% de sus ingresos por publicidad a la plantación de árboles.
Oroeco (para iOS y Android). Para ver y hacer seguimiento de tu propia huella de carbono. Además, te da consejos personalizados para reducir tu impacto ambiental y puedes inspirar a otras personas compartiendo tus logros y acciones.
TooGoodToGo (para iOs y Android). Para comprar comida en tiendas y restaurantes/bares que ya la van a tirar porque no se puede vender (pero aún se puede comer) y evitar el despilfarro de comida.
Earth Now (para iOs y Android). Esta app nos enseña en datos los signos vitales del planeta en tiempo real emitidos desde satélites en todo el mundo. Desde la temperatura del aire, el dióxido de carbono, el monóxido de carbono, el ozono… También la gravedad y las variaciones en el nivel del mar.
Plume air report (disponible en iOS y Android). Con esta app podemos ver la contaminación a la que estamos expuestos. La aplicación utiliza el índice Plume para indicar el nivel de polución al que está expuesto una ciudad a tiempo real.
En algunas webs han hecho también selección de sus apps favoritas de lucha contra el cambio climático, como esta de umhsapiens o pandaancha. Échales un ojo también.
Desde luego que no son las únicas apps ni webs de referencia. Estoy segura de que tú conoces (e incluso utilizas) alguna otra. Te agradezco que la compartas conmigo (y con todos) contestando a este boletín.
¡Feliz verano!
PD. Supongo que ya lo sabes, pero mi nuevo libro ya está en librerías: Hablar en público en 4 pasos. Método basado en el Viaje del Héroe. En septiembre lo presentaremos en Vitoria-Gasteiz y Barcelona (de momento).